Lo interno mágico.

Como dos hormigas deambulamos por todo el espacio abigarrado de cosas, cajas, muebles, maderas y un sin fin de artefactos de tipos y funciones distintas. Algunos traen memorias olvidadas que nos recuerdan que forman parte aun de nuestros haberes, otras encuentran el triste destino del desecho, como bien sucede en una mudanza o remodelación cualquiera.
Ese cuarto, que nuevamente se va tiñendo de blanco, vuelve a vernos andando de lado a lado, apresurados por terminar y comenzar, tendidos del hilo de la esperanza y la ilusión, como la llegada a casa de un nuevo bebé, bebiendo el vino de la dicha, la memoria y la espera. Y es eso en realidad lo que se esta gestando, un hijo que crece sobre una barriga que ha perdido ya, igualmente ha parido de manera natural y no reconoce heridas, sino que esta dispuesta  y ávida nuevamente a dar a luz. 
El cuarto se ilumina como en la llegada de La anunciación y con él  este par de personajes que regresan a la carpintería, pintura y labores de bricolaje, al son de  esta otra danza siguen tocándose desde y hasta lo mas profundo, creando lo que habla del amor, lo interno mágico.

Comentarios

Unknown ha dicho que…
parece cuadro de fra angelico
....y nos va quedar mejor!!!
tambien aquí ha llegado el espíritu

Entradas populares