desvariando..

He venido caminando desde no tan lejos, por una ruta que no es la habitual. 

No había esta mañana tantos pájaros como si automóviles,  no los vi siquiera ir a buscar el desayuno a los arboles como de costumbre. 

Solo caminaba mientras veía las calles en su propio despertar, con los locatarios llegar a sus negocios, a los trabajadores tomando sus almuerzos, y sí muy de lejos veía al mar. He de reconocer que de todo, es lo que mas me gusta de este lugar, el mar, siempre esta ahí, azul siempre ahí, cantando sus olas, aunque ya siendo cotidiano a veces no lo escucho.

De camino de repente pienso en todo este asunto que he venido viendo de dos meses hacia acá, en lo aterrador, en lo decepcionante, en la negra realidad de un país que se viste todos los días de luto, sin dar ya luto, o no tanto, o capaz que llego a lo de siempre y es que no se quiere mejorar, y como lamento de verdad que tenga que ser así.

De camino de repente pienso en lo que ha pensado cualquier hombre cuando esta en este lado de la realidad, cuestionando el sentido que tienen las letras escritas con tinta verde, de jardines y selvas, de playas y ciudades, el sentido que tienen las palabras escritas con manchas y colores que uno de terco insiste en meter en botellas, para que alguien las lea, para que pase que?..

Esperando que pase algo, esperando afectar a alguien, esperando sembrar humanidad.

Llego a casa y no estas. Me recibe Goya con sus saludos y suplicas, tiene hambre. Apenas abro la puerta y aun huele a niños y café. Quiero decirte un poema. Entonces me tomo un respiro y pienso en escribirte el saludo matutino de los buenos días, para que sepas también hoy que te quiero, pero hombre!, me ha salido esto.