De casi un fin de año

Entre música de Toñita la negra, trabajo de oficina y reuniones familiares vamos cerrando el año. Ya empiezo a sentir la brisa del otro, el que viene, y a programarme para todo lo que consigo trae. De repente empiezo a recordar muchas cosas, a soñar y desear algunas otras. De repente extraño mi casa y constantemente mis paseos de madera, y acompañada todo el día de café disfruto esa nostalgia que tambien me saca buenas sonrisas, y muchos suspiros.
Ya casi terminamos el año, mañana todo un día del sabor del paisaje mexicano y a esperar pacientemente lo que venga por delante, que en eso no hay certeza... y si muchas ilusiones.