... del confinamiento..

Es difícil a veces escribir con la multitud de información y sensaciones en este confinamiento, no es algo nuevo para nosotros, hemos pasado muchas temporadas encerrados trabajando y en crisis financiera, así solía ser nuestra vida antes de abrir el estudio al público a lo cual no hace hoy ninguna diferencia en ese sentido, como para otros seguramente esta siendo, en eso somos privilegiados muchos los que podemos quedarnos tranquilamente en casa, con pocos recursos pero a salvo, solo que en esta ocasión el contexto es abrumador.

La incertidumbre y el miedo corre por las venas de todos, las historias llevaban un curso, llenos de planes e ideas en nuestra vorágine de vida antes de que la  pandemia nos alcanzara y que no hace sino ubicarnos y vernos vulnerables e incapaces. Los días no tienen un nombre y el tiempo se escurre por el cuerpo y los objetos, se hace redondo. La realidad parece entenderse como una ficción fantástica mas que como un relato realista, como si viviéramos en un cuento de ciencia ficción de los 40's o 50's,  como los relatos que siempre alguno de nosotros ha escuchado al respecto de otras epidemias, guerras o circunstancias difíciles que han rebasado a la humanidad en otros momentos de la historia.. deberíamos ser mas agradecidos y empáticos con quienes siguen afuera dando servicio, ellos también tienen historias y seres queridos, expuestos están, ¿Qué pasara mañana para aquellos que hayan sobrevivido y como serán las cosas?, es la pregunta de todos, si es que sobrevivimos, no lo sabemos, pero sin duda las historias siguen escribiéndose y la tinta corriendo mientras la sangre corre por nuestras venas, una historia que se leerá por otros en lo conocido como porvenir, con suerte...

Pienso en la gente que ha pasado por mi vida, la que he observado, la que me acompaña, en quienes me hubiera gustado tener cerca,  la que me ha sido importante, la que solo pasó, la que no ha pasado o pasará, en la gente mas desprotegida, en quienes estuvieron tan  solos,  pienso en las historias que con ellos he  reconstruido en mi cabeza, e imagino las suyas, deseando hoy se encuentren bien al igual que sus seres queridos en una burbuja amorosa y armónica,  y veo a mis dos saltimbanquis y creo que hoy mas que nunca podemos vivirnos al cien entre los que estamos mientras estemos bien y decirnos con cuidados cuanto nos amamos, carpe diem, algo que como cliché escuchamos aun en la publicidad, pero algunos hacen poco..

Aquí en mi paraíso estamos bien, como Nocturno de Chopin, viviendo al día cubriéndonos con lo que sabemos hacer, dibujar y pintar, querernos y hacer los quehaceres que nos permiten seguir viviendo lo mejor que se puede.. mientras esto pase con miedo en incertidumbre como todos y mucha esperanza...