en el espejo...

Bien decía el diablo que la vanidad era su pecado favorito.
Y no diré que el diablo nos tienta, pues no mas que un ente donde depositamos las responsabilidades que no queremos asumir,  sino que a veces uno mismo va a buscar esos terrenos oscuros sin ayuda necesaria, para sentirse muy seguro, o muy bien con uno mismo, o no sé,  es una estupidez pues es bien sabido que eso no conduce a nada propositivo sino todo lo contrario.

Y después de la lluvia de palabras, y la señal de alto me lleno de  ruido.. y no es hasta mas tarde casi como regalo del tiempo que voy a verme al espejo, y me descubro traicionada, desleal, infiel con esa a la tengo enfrente, bien sabemos tu y yo lo que hay y lo que no, y es que no he seguido tus consejos, le digo...
me conoce bien, y sabe que me he mordido...

Hay un silencio entre los cuerpos y deseos contenidos presente todo el tiempo, y confieso que no sé que se hace en estos casos, desear regresar el tiempo no es opción, llenarme de culpa es inevitable, o lloriquear...  pero no sirve , a veces no soy tan hábil para resolver problemas aunque quiera pretender que lo sé..  corre dijo la tortuga escuche por ahí... y le grito a la sensatez que siga los pasos que en otras ocasiones bien que sé aconsejar a otros...
... como es uno bien tonto a veces...